De visita en Santiago de Chile, todo el mundo me cuenta qué estaba haciendo cuando ocurrió el terremoto de febrero. Muchos lo narran con cierto humor: así parece que ha pasado más tiempo del que ha pasado desde la tragedia. Ahora empieza el buen tiempo. El sol quiere volver. Camino por la comuna de Providencia. El suelo descansa. Los pies siguen temblando.