8 de octubre de 2010

El pique con Piqué

Sergio Ramos parece un muchacho de convicciones inamovibles, quizá para compensar que los entrenadores no dejan de moverlo del centro al lateral. En la selección, Ramos es lateral pero da entrevistas centralísimas. A Piqué, que se llama Gerard, un periodista catalán le hizo una pregunta en su lengua materna. Piqué se ofreció de traductor, pero ya era demasiado tarde: había herido el patriotismo de Ramos. Informar en catalán sobre la selección nacional española podría verse como un triunfo más de la Roja, como una forma de integrar al catalanismo dentro de España. Claro que, para eso, habría que ser capaz de abrirse a ambas bandas. Y mi Sergio tiende siempre a la derecha.